Baiano

El municipio de Baiano se encuentra en la zona de Bassa Irpinia. Es una localidad de 4742 habitantes situada a 196 metros sobre el nivel del mar y a 22 km de Avellino. El territorio abarca 12,30 km² y los municipios vecinos son: Avella, Mugnano del Cardinale, Sirignano, Sperone y Visciano. Está atravesado por el arroyo Gaudio-Sciumminaro.  
La etimología del nombre parece proceder de una propiedad romana, Praedium Badianum, es decir, la finca de Badio, vinculada a la cercana loccalidad de Avella. Sus habitantes se llaman baianesi y San Esteban es su patrón. 
 

LUGARES DE INTERÉS

    Iglesia de San Esteban: data del siglo XVI y conserva un altar artístico y la estatua de madera del patrón de Baiano.
    Ermita de Jesús y María: data del siglo XVI y es un lugar de retiro, como también se deduce de los elementos arquitectónicos típicos de piedra.
    Iglesia de los Santos Apóstoles Felipe y Santiago: edificio religioso del siglo XVIII, ostenta una espléndida fachada barroca típica de la Campania, con preciosas esculturas de mármol y madera en su interior. 
    Iglesia de la Santa Cruz: iglesia de origen altomedieval, donde predicó San Alfonso María de Ligorio.
    Barrio Vesuni: corazón del centro histórico, característico y pintoresco.
    Villa Rustica Romana y Monumento Funerario: restos arqueológicos y romanos que todavía conserva Baiano. 
     

EVENTOS

    Festa del Maio: la Festa del Maio se celebra el día de Navidad, pero la preparación es muy larga y comienza el 13 de diciembre, día de Santa Lucía.
    Fiesta de la avellana: celebrada en otoño, esta fiesta atrae a numerosos visitantes de toda la Campania que están dispuestos a vivir el acontecimiento con espectáculos de música, danza, teatro y circo al aire libre pero, sobre todo, con delicias a base de avellana.
    Fiesta de la Epifanía: una celebración de dos días con juegos hinchables, atracciones y animación infantil que tiene lugar en una carpa cubierta y climatizada.
    El joven... Maio: una iniciativa organizada por el Foro de la Juventud que se celebra los días 22 y 23 de diciembre y reúne la enogastronomía local y las tradiciones históricas, con la colaboración de las numerosas asociaciones de Baiano. 
     

PLATOS Y PRODUCTOS TÍPICOS

     Avellana: la avellana de la Irpinia (nux avellana), con su fuerte vínculo histórico, cultural y socioeconómico con su zona geográfica de origen, representa una excelencia gastronómica con un rico surtido de variedades: la Mortarella, la San Giovanni, de fruto alargado (más de dos tercios de la producción), la Tonda Bianca y la Tonda Rossa di Avellino.
     Capicollo PAT: embutido elaborado a partir de un corte de carne extraído de la parte posterior del cuello del cerdo, del que deriva su nombre. 
     Pan de Baiano PAT: de forma alargada y miga elástica, tiene aberturas grandes y desiguales y una corteza gruesa y crujiente.
     Fiocco di prosciutto PAT: también conocido como «Culatello di Mugnano», es un embutido ahumado muy apreciado que se elabora a partir del fémur de las patas traseras del cerdo tras un largo proceso. 
     Caciocavallo Silano DOP: queso semiduro, de pasta hilada, elaborado con leche de varias vacas, entre ellas podólica.  
     

DATOS CURIOSOS

Con la antigua tradición de la Festa del Maio, desde el 13 de diciembre (Santa Lucía) hasta Nochebuena, los habitantes de Baiano participan en las «Mess'e notte» -misas nocturnas-, que comienzan a las cinco de la madrugada, para que la gente pueda ir a trabajar después de la celebración. 
 

ANTECEDENTES HISTÓRICOS

Los orígenes de Baiano se remontan a mucho tiempo atrás. En la época romana, el territorio, tras ser cedido por la tribu Galeria, conoció el establecimiento del dominio longobardo y del ducado de Benevento. Más tarde, fue feudo de la familia Orsini y luego parte de la Baronía de Avella. 
En 1715, se convirtió en municipio autónomo con el nombre de Baiano y formó parte de la provincia de Terra di Lavoro, es decir, la actual Caserta. Con la unificación de Italia, Baiano se incorporó a la provincia de Avellino por compensación. Con el tiempo, tuvo un fuerte desarrollo demográfico, especialmente durante el siglo XIX, gracias también a la inauguración de la estación de ferrocarril Nápoles-Baiano. 
Hasta 1923, el pueblo fue la capital del Mandamento y la sede de la Pretura, la prisión del Mandamento y otras oficinas administrativas.

 Las experiencias convierten unas vacaciones en un viaje memorable lleno de recuerdos. Baiano acoge a sus visitantes con todas sus delicias de avellana, que generan emociones y sensaciones memorables.