Castello baronale (Principi Grimaldi)

El Castillo baronal (Príncipes Grimaldi) de Monteverde, también conocido como Castello Grimaldi, está situado en el punto más alto de la Salita Castello.

Construido en la cresta de un escarpe rocoso que domina el valle del Ofanto, fue edificado por los longobardos y los primeros testimonios se remontan a un documento del año 897, en el que se afirma que la aldea contaba con un edificio fortificado.

Las sucesivas dominaciones a lo largo de los siglos han provocado cambios en la fortaleza. 
Construido sobre una base trapezoidal de piedra local tosca y labrada, fue adaptado y ampliado en el siglo XV por los aragoneses, quienes añadieron cuatro torres angulares, dos cilíndricas y dos cuadradas, y el puente levadizo, que ya no está. 
El castillo fue reconstruido casi en su totalidad tras el terrible terremoto de 1851, adquiriendo su configuración actual, que conserva el trazado aragonés resultante de las modificaciones realizadas en el siglo XV. En el exterior aún son visibles las torres, las troneras y las ventanas rectangulares, mientras que en el interior hay una capilla con un altar, una pila, realizada por Carpencivo por orden del obispo Loseto en 1343, y algunos frescos.

El castillo baronal sirvió tanto de fortaleza, para defender el territorio circundante de incursiones enemigas, como de residencia nobiliaria; en 1744, los barones de Sangermano lo convirtieron en su hogar. Otras familias aristocráticas que se sucedieron a lo largo del tiempo son los Orsini, los Guiscardo y los Caracciolo, a quienes perteneció hasta la abolición de los derechos feudales en 1806, pero sobre todo los Grimaldi, cuyo nombre lleva aún hoy el edificio. En 1532, el castillo, junto con el territorio de Monteverde y otros feudos, fue donado por el emperador a Honorato I de Mónaco, príncipe de Mónaco, a cambio de su lealtad y la de sus sucesores.

Completamente remodelado en el 2006, el Castillo baronal (Príncipes Grimaldi) ofrece una sugerente vista de los valles de abajo y alberga el Museo del Trigo. Un lugar donde la historia se evoca a través de instalaciones tecnológicas modernas e innovadoras, que hacen que la visita, amenizada por guías conocedores, sea dinámica e interesante, en uno de «I Borghi più belli d'Italia» (Los pueblos más bonitos de Italia).