Chiesa di S. Maria Assunta di Montemarano

La iglesia de Santa Maria Assunta di Montemarano, también conocida como Catedral o Duomo, se encuentra en la Piazza del Popolo, junto al ayuntamiento.

El edificio religioso sirvió de Catedral desde 1058, año de fundación de la Diócesis de Montemarano, hasta 1818, fecha de supresión de la sede. No existen datos históricos seguros sobre sus orígenes, pero por comparación con otras catedrales del mismo estilo (como, por ejemplo, la catedral de Avellino), su construcción puede remontarse aproximadamente al año 1000. A lo largo de los siglos, la iglesia ha sufrido varias restauraciones y reconstrucciones, algunas de las cuales han alterado profundamente sus líneas arquitectónicas románicas originales. Dañada por el terremoto del 23 de noviembre de 1980, se volvió a abrir al público en 1991 tras una amplia labor para reforzar su estabilidad.

De la iglesia de Santa Maria Assunta actual se aprecia sobre todo la sobriedad de la fachada, con un portal central del siglo XVI en piedra caliza local. En el interior, sin embargo, la majestuosidad de la estructura es sorprendente y varios elementos destacan a la vista del espectador, como las bases de las antiguas columnas románicas y los capiteles de las antiguas columnas de piedra. En el interior del edificio también se conservan valiosas obras, como el cuadro de la «Virgen con el Niño y los ángeles», atribuido a Andrea Vaccaro (1600-1670), el coro que sostiene un precioso órgano del siglo XVIII, la «silla» de San Juan, no expuesta al público, con decoraciones de escenas cortesanas, y también varias estatuas valiosas, como un busto de plata de San Juan del siglo XVIII, un busto de madera de San José del siglo XVII, y las estatuas de San Antonio Abad y de la Asunción realizadas en cartón piedra a principios del siglo XX.

La iglesia de Santa Maria Assunta, que sigue siendo un claro testimonio del período diocesano que vivió la comunidad de Montemarano, es uno de los monumentos religiosos más antiguos de la Irpinia.