Parco Archeologico di Carbonara

El Parque Arqueológico de Carbonara está situado a menos de dos kilómetros del centro de Aquilonia y constituye un importante y valioso testimonio del primitivo núcleo urbano de la ciudad.

Para los visitantes que pasan por él cada día, este parque parece una «Pompeya medieval"» como lo han llamado muchos estudiosos, mientras que para los habitantes de Aquilonia representa su símbolo más importante de la memoria histórica de la comunidad de Carbonara, como se llamaba el pueblo hasta 1861. 

De hecho, en el Parque Arqueológico de Carbonara se pueden ver los restos de la antigua ciudad devastada por el terremoto de 1930. Es posible redescubrir, por ejemplo, lo que fue la plaza del Ayuntamiento, con su característico pavimento, pero también las iglesias de San Juan y de la Inmaculada Concepción, el palacio de justicia y las cárceles. 
En el parque se puede admirar, sobre todo, una fuente barroca del siglo XVIII, única por estar construida en dos niveles: en el primero se encuentran los tres grandes caños de agua que emergen del frontal de piedra tallada, coronados por otros tantos nichos abovedados; en el segundo, el agua que allí mana ininterrumpidamente desde hace siglos es conducida a través de un canal subterráneo especial. Esta fuente también presenta un lavadero de piedra estriada, que discurre a lo largo de dos líneas, donde las mujeres de Carbonara solían lavar su ropa.

En el parque también se encuentra el Palazzo Vitale, futura sede de actividades de estudio, exposiciones e intercambios culturales, y el Museo de las Ciudades Itinerantes, que forman un todo en el itinerario cultural que se ofrece al visitante.

La recuperación de la arquitectura urbana original sumerge a los visitantes del Parque Arqueológico de Carbonara en un escenario de tiempos pasados, sacando a la luz la historia milenaria de la antigua comunidad, evocada hoy en la Piazza, con conciertos de música tradicional, representaciones teatrales e históricas.