Montecalvo Irpino

El municipio de Montecalvo Irpino se encuentra en la zona del Valle de Cervaro-Miscano. Es una localidad de 3475 habitantes situada a 623 metros sobre el nivel del mar y a 60 km de Avellino. El territorio abarca 54,01 km² y los municipios vecinos son: Apice, Ariano Irpino, Buonalbergo, Casalbore, Castelfranco in Miscano y Ginestra degli Schiavoni. 
Para algunos, la etimología del nombre parece proceder del latín mons calvus, que significa «montaña rocosa, desprovista de árboles»; según otros, procede de mons galbus, que significa «montaña amarilla» debido al color de la toba o de las flores de retama presentes en la zona. Sus habitantes se llaman montecalvesi y San Felice es su patrón. 
 

LUGARES DE INTERÉS

    Castillo de Pignatelli: construido en la antigüedad, su trazado actual es el resultado de las obras de restauración llevadas a cabo por los últimos señores feudales: los Pignatelli, de quienes toma su nombre, y los Carafa.
    Museo della Religiosità Montecalvese e della Memoria Pompiliana: realizado gracias a la generosidad de los fieles, alberga numerosas obras de arte, objetos pertenecientes a las iglesias de Montecalvo y recuerdos de la presencia de San Pompilio Maria Pirrotti en su ciudad natal.
    Trappeto: antiguo pueblo con «casas-cueva», típicas viviendas rupestres mediterráneas, probablemente construidas en el Neolítico, o incluso en el Paleolítico Superior.
    Iglesia de San Pompilio Maria Pirrotti: iglesia matriz de Montecalvo y santuario dedicado a San Pompilio Maria Pirrotti, discípulo de Giuseppe Calasanzio, fundador de las Escuelas Pías.
    Bolle della Malavizza: pequeños volcanes de lodo que generan emisiones de gas hidrocarburo, principalmente metano, y un flujo continuo en aguas débilmente salobres.
    Palazzo Bozzuti-Pizzillo: data del siglo XVI y perteneció a la familia Bozzuti, de origen napolitano, una de las familias más nobles de la época.
    Palazzo Caccese: construido en la segunda mitad del siglo XVII, de todo el edificio hoy solo queda en pie el portal con su balcón central.
    Palazzo De Cillis: data del siglo XVIII y presenta un portal de piedra ricamente decorado en estilo floral con característicos balconcitos enrejados.
    Palazzo De Marco: otro edificio señorial de la ciudad, data del siglo XIX y presenta portales con un escudo nobiliario en piedra labrada y balcones y ventanas característicos.
    Palazzo Peluso: la fachada original, que duró hasta 1981, se caracterizaba por una serie de ocho balcones, pero hoy en día resultan especialmente interesantes las bodegas, que se extienden por toda su superficie.
    Otros: Iglesia S. Bartolomeo Apostolo, Iglesia S. Maria Assunta, Iglesia San Gaetano da Thiene, Convento de S. Antonio - Oasi Maria Immacolata, Iglesia abacial C/da Corsano - Chiesa di San Nicola, Iglesia del Carmine, Iglesia de S. Maria SS. Regina della Pace, Murales de Via Maddalena y Hospital Crociato S. Caterina.

EVENTOS

    Millenaria Fiera di Santa Caterina: kermés celebrada en noviembre con un evento de tres días que ofrece productos de la agricultura local y la artesanía, comida y degustaciones de vino, espectáculos de música, cabaret y visitas culturales.
    Sagra dei Cicatielli: evento enogastronómico en agosto centrado en la pasta fresca hecha a mano.
    Fiesta de San Pompilio: celebraciones en honor a San Pompilio que tienen lugar los días 19 y 20 de agosto. 
     

PLATOS Y PRODUCTOS TÍPICOS

     Pan de Montecalvo PAT: caracterizado por una corteza gruesa que encierra una miga alta y compacta, en su interior presenta una cavidad, prueba de su perfecto éxito, cuyo secreto reside en la utilización de ingredientes genuinos y en el respeto de la receta milenaria.
     Saragolla PAT: una de las variedades de trigo duro más antiguas cultivadas en Irpinia, es excelente para la panificación.
     Speuta PAT: también llamada «speutona», es una gramínea correspondiente al triticum spelta, la espelta mayor utilizada para la elaboración de panes y sopas por los pueblos itálicos.
     Irpinia Colline dell'Ufita DOP: aceite de oliva virgen extra procedente en gran parte de la variedad Ravece, caracterizado por un agradable sabor amargo y picante.
     Caciocavallo Silano DOP: queso semiduro, de pasta hilada, elaborado con leche de varias vacas, entre ellas podólica. 
     

DATOS CURIOSOS

La leyenda atribuye el origen del fenómeno mefítico, le Bolle della Malvilla (las Burbujas de Malvizza), a la cólera de los dioses, que castigaron a un tabernero por robar a los viajeros de la Vía Traianea, confinándolo a él y a sus sirvientes en las entrañas de la tierra de las burbujas: cada año, el 15 de agosto, aún pueden oírse los lamentos del hombre. 
La pacchiana es un traje típico de Montecalvo que aún hoy lucen muchas mujeres mayores o en fiestas tradicionales (como en Carnaval) que remiten a la etimología original del término, es decir, a un deseo de diversión, alegría, mezcla de olores y sabores, canciones y tarantelas que hacían pensar en la pacchia (jauja). 
Montecalvo forma parte de la asociación nacional de Ciudades del Pan. 
 

ANTECEDENTES HISTÓRICOS

Varios hallazgos arqueológicos y todo el pueblo de Trappeto sugieren que los primeros asentamientos en la zona de Montecalvo Irpino surgieron probablemente en el Neolítico, o incluso en el Paleolítico Superior. 
La primera información histórica sobre la localidad, sin embargo, se encuentra en documentos del año 1000 y se sabe que, desde finales del siglo XIV, Montecalvo Irpino siguió las vicisitudes del cercano condado de Ariano Irpino.  
El terremoto de 1456 dañó profundamente las casas del pueblo y, posteriormente, se produjo una expansión urbana fuera de las murallas que ahora están destruidas. 
Entre los dominios de la zona, cabe destacar el de la familia Carafa: en efecto, el feudo fue vendido a Alberico Carafa, primer duque de Ariano en 1501, y perteneció a esta familia hasta finales del siglo XVI, cuando fue conquistado por Carlo Gagliardi, pasando después a la familia Pignatelli. Esta última ostentó el feudo de Montecalvo Irpino hasta 1806, año de la abolición de los derechos feudales en el sur de Italia.

 Montecalvo es el buen olor del pan caliente y recién horneado, una fragancia que detiene el tiempo y acaricia a quien quiere perderse en su tierra.