Atripalda

El municipio de Atripalda está situado en la comarca del Valle del Sabato. Es una ciudad de 10 805 habitantes situada a 294 metros sobre el nivel del mar y a 3 km de Avellino. El territorio abarca 8,59 km² y los municipios vecinos son: Aiello del Sabato, Avellino, Cesinali, Manocalzati, San Potito Ultra, Santo Stefano del Sole y Sorbo Serpico. 
La etimología del nombre puede derivar de Troppualdo (o Truppoaldo), un rey lombardo que poseía algunas zonas a orillas del río Sabato y que, hacia el año 1060, hizo construir un castillo con su nombre. Según otras fuentes, el nombre derivaría de trepalium, lugar donde se ejecutaba a los delincuentes: para apoyar esta tesis, hay quien ve en el símbolo del municipio (un brazo armado del flagelo) un recordatorio de este origen. Sus habitantes se llaman atripaldesi y San Sabino es su patrón. 
 

LUGARES DE INTERÉS

    Zona arqueológica de la antigua Abellinum: importante yacimiento arqueológico que incluye los restos de la antigua colonia romana de Abellinum, de la que procede la actual capital de Irpinia.
    Iglesia de San Hipólito Mártir: edificio religioso de la época paleocristiana tardía con aspecto del siglo XIX, conocido por su cripta, el Specus Martyrum, antiguo cementerio paleocristiano de Abellinum. 
    Museo Palazzo della Dogana dei Grani: situado en la Piazza Umberto I, este museo expone objetos históricos y artísticos recuperados tras el terremoto de 1980.
    Iglesia de Santa Maria del Carmine: iglesia distinguida por la estatua de 1739 de la Virgen María y la Coronación de Nuestra Señora del Monte Carmelo representada en el techo.
    Iglesia de San Nicolás de Tolentino: iglesia consagrada, también sede de conferencias, conciertos y actos culturales.
    Antiguo Convento de los Padres Dominicos (Palazzo Civico): convento que ha recuperado su antigua belleza como sede municipal gracias a una hábil restauración.
    Iglesia de Santa Maria delle Grazie: fue utilizada por la familia Caracciolo como capilla aristocrática.
    Antiguo monasterio de Santa Maria della Purità: conservatorio del siglo XVII creado para funciones de refugio y protección; en la actualidad es sede de actos culturales.
    Complesso Monumentale degli Alcantarini: también conocido como Iglesia y Convento de San Pasquale, ofrece alojamiento para grupos de todas las edades.
    Palacio Caracciolo: data del siglo XVII y tiene una hermosa logia superior abierta al parque y un importante ejemplo de jardín italiano.
    Zonas verdes: Parque Público San Gregorio, Villa Comunale «Piazza del Sole» y Parque Acacia. 
    Otros: Piazza Di Donato, Piazzetta degli Artisti y Campanario de San Sabino Vescovo. 
     

EVENTOS

    Focaroni di San Sabino: hogueras en honor al patrón programadas para febrero.
    Giullarte: festival internacional de teatro de calle y artesanía antigua, previsto para septiembre.
    I Luoghi della Musica: festival Internacional de música de cámara programado durante el período estival.
    Estate Atripaldese: evento musical y teatral programado durante el período estival.
    Navidad Atripaldese: espectáculos musicales y teatrales programados durante el período natalicio.
    Carnaval en la Plaza: desfile de disfraces por las calles de la ciudad, previsto para febrero.
    Fiesta de San Antonio: celebraciones en honor a San Antonio de Padua, previstas en junio.
    Fiesta de San Sabino: celebraciones en honor al patrón el 16 de septiembre. 
     

PLATOS Y PRODUCTOS TÍPICOS

     Rape e patate: un plato típico de grelos, patatas y guindillas.
     Fiano di Avellino DOCG: uno de los mejores vinos blancos de Italia y del mercado internacional.
     Caciocavallo Silano DOP: queso semiduro, de pasta hilada, elaborado con leche de varias vacas, entre ellas podólica.  
     

DATOS CURIOSOS

La colonia romana de Abellinum, nombre latino de Avellino, estaba situada en el actual municipio de Atripalda. 
Se le concedió el título de ciudad mediante real decreto el 18 de julio de 1867. 
 

ANTECEDENTES HISTÓRICOS

Los orígenes de Atripalda son antiguos. Según la tradición, Sabatio, bisnieto de Noé, habría iniciado el primer asentamiento humano a orillas del río Sabato, llamado Sabathia . Sin embargo, para tener pruebas históricas de la existencia de civilización en el actual territorio de la ciudad de Atripalda, hay que esperar hasta la época samnita, cuando se fundó Abellinum. 
En el siglo XI, el rey lombardo Troppualdo sentó las bases para el nacimiento de la actual Atripalda, que con el paso de los siglos se convirtió en un importante centro económico, cultural y artístico. Más tarde fue feudo de las familias Capece, Orsini y Caracciolo: esta última familia la administró durante unos dos siglos y medio, hasta la abolición del feudalismo en 1806. 
Gravemente dañada por el terremoto del 23 de noviembre de 1980, en los últimos años, Atripalda ha experimentado un importante aumento de población que le ha permitido volver a despertar su antigua vocación comercial.

 Atripalda tiene un pasado tangible que sigue vivo con la zona arqueológica Abellinum y al visitarla se establece esa conexión con el tiempo, compartiendo un recuerdo, una experiencia que no hay que perderse.