Castello ducale di Bisaccia

El castillo ducal de Bisaccia se alza sobre un espolón del monte Calvario.

Construido por los lombardos hacia mediados del siglo VIII y remodelado por Federico II de Suabia tras el terremoto de 1198, este bastión se levantó como fortaleza para controlar una línea defensiva estratégica con la función de proteger los territorios del oeste y el norte de Apulia.

En el siglo XVI, perdida su función militar y defensiva, se convirtió en residencia señorial fortificada y sus 42 habitaciones acogieron, entre otros, al primer duque de Bisaccia, Ascanio Pignatelli, cuyo escudo de armas familiar, que ostentó el Castillo Ducal hasta principios del siglo XIX, se conserva en la puerta principal de la residencia. Según la tradición, fue famosa fue la estancia del erudito Torquato Tasso en 1588 como huésped de su amigo Giovan Battista Manso, entonces señor feudal.

Grandes piedras de río mezcladas con bloques cuadrados de piedra caliza y mortero muy duro conforman las imponentes murallas defensivas del Castillo Ducal sobre las que se alza una torre con torreón de planta cuadrada, originalmente dotada de puente levadizo, desde la que, desde sus 12 metros de altura, se puede admirar todo el valle a sus pies. 
A través de un gran portal de entrada, y pasado un corto vestíbulo, se accede a un patio pavimentado desde el que se puede acceder a los ambientes de la planta baja. Un tramo de escaleras de piedra, coronado por una artística y elegante logia, conduce a la planta principal, donde se encuentran varias salas restauradas, entre ellas un impresionante vestíbulo, utilizado ahora como sala de conferencias. 
En la planta superior, la fascinante logia, formada por veintiocho arcos sobre pequeñas columnas de piedra labrada local, permite contemplar un maravilloso panorama.

Recientemente se ha inaugurado aquí el Museo Cívico Arqueológico, que alberga diversos hallazgos, entre ellos La Tumba de la Princesa, de la Edad del Hierro (finales del siglo IX-VII a.C.), que destaca por su precioso ajuar de valiosos vasos, joyas y otros objetos, encontrados en un recinto de piedra bien delimitado, lo que indica la presencia de un personaje de alto rango en su interior.

No lejos de la Concatedral (o Iglesia de la Natividad de María), el Castillo Ducal domina con su posición la localidad de Bisaccia y ofrece a los visitantes una belleza paisajística y arquitectónica sin igual.