Tratti del Castello di Pratola Serra

Las ruinas del Castillo de Pratola Serra atestiguan lo que queda de la antigua casa señorial medieval, situada en la localidad Serra de Pratola.

Surgido como centro no solo defensivo, sino también de acogida de grupos romano-bárbaros, el Castillo de Serra fue donado al clero, al igual que muchas otras localidades del ducado de Benevento, antes del año 1000. Uno de los primeros documentos, en nombre del emperador Conrado de Alemania, confirma la sujeción del Castillo de Serra al monasterio de Santa Sofía de Benevento. En el siglo XI, con la invasión de los normandos, el Gastaldato de Avellino se dividió en dos partes y el Castillo de Serra pasó a formar parte del condado de Montaperto. Tras ser incendiado en 1442 por orden de Alfonso de Aragón, el feudo de Serra acabó en manos primero de la familia Poderico y luego de la familia Tocco di Montemiletto, que mantuvo el castillo de Serra y los feudos de Pratola hasta 1806, año de la abolición del feudalismo.

A lo largo de los años, varias viviendas se han superpuesto a la antigua fortaleza, alterando sus características y funcionalidad. De hecho, hoy en día, la comunidad local también define con el término «castillo» los edificios situados en la parte alta del pueblo, de los que forman parte integrante el actual oratorio y las casas contiguas. 
La fortaleza parece haber conservado su forma poligonal original, con un recinto amurallado y dos puertas, correspondientes a las dos torres: una de ellas se encuentra cerca de la Porta della Terra, semioculta y empotrada en el interior de los edificios; la otra se eleva sobre las rocas detrás de la casa rectoral y domina la Piazza del Tiglio.

Importante huella histórica para la comunidad local, las ruina del Castillo de Pratola Serra conservan el inconfundible encanto que caracteriza a los pueblos medievales.